Un grupo de 48 venezolanos y dos africanos, recluidos en el Centro de Detencion de Inmigrantes de Aripo, en Trinidad y Tobago, denuncian irregularidades no solo en la detención ilegal sino también el riesgo de contagio de Covid19.
En conversaciones con familiares de los detenidos pudimos conocer que la mayoría de los venezolanos allí recluidos fueron aprehendidos entre diciembre 2019 y enero del presente año.
Los 48 venezolanos son en su mayoría de Güiria, Caracas, Tucupita, La Guaira y Margarita.
«Muchos han pagado la fianza que se que impone para salir y ser devueltos a Venezuela, pero ni por eso son liberados», denunció a Núcleo Noticias, la esposa de uno de los detenidos, quien por temor a represalias cambió su nombre por Josefina.
La mujer contó que su esposo fue detenido el 31 de enero por estar ilegal en la isla y pagó la fianza correspondiente a 5000 tt (741$) y dos meses después, aún sigue encarcelado y sin información alguna de su proceso.
Josefina detalló las condiciones de reclusión y aseguró que todos los detenidos «reciben sucres comidas y se les respeta sus derechos humanos, pero nadie les explica por qué siguen presos si ya pagaron la fianza».
Sobre su esposo, cuyo nombre se reservó, aseguró que es de Caracas y antes de irse buscando un futuro mejor, era cocinero, barmant y mesonero.
Detalló que en el mismo centro de detencion hay mujeres venezolanas pero desconoce el número, porque los hombres y mujeres no tienen contacto en esa cárcel.
Sobre la pandemia contó que los presos no han recibido dotaciones de tapabocas y están expuestos a contagiarse.
«Pedimos ayuda, queremos que nuestros familiares sean liberados y regresados a Venezuela, pero no sabemos a dónde acudir», dijo Josegina para finalizar.
Desde el año 2015 hasta el año 2018, los ilegales detenidos eran condenos a 3 años de carcel, desde el 2019 y bajo la presión de las Naciones Unidas, bajaron la condena de 3 a 6 meses de prisión.
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