Claudia Moreno es una barquisimetana, promesa del tenis junior venezolano en la década del 2010, y una de las pioneras del beach tennis criollo.
Ganó una beca colegial en Estados Unidos a los 15 años, representó a Venezuela en el Mundial por equipos de Beach Tennis ITF en 2012 y al día de hoy lucha en las playas de la Florida en el circuito profesional de ITF donde ha levantado tres trofeos BT10 en el último año mientras ejerce a la par como arquitecta en el departamento de diseño interior y detalles arquitectónicos.
La joven oriunda de la ciudad musical de Venezuela se aferró a una raqueta de tenis apenas a los cuatro años, y desde entonces, su vida giró alrededor del deporte. Su rápido ascenso a nivel infantil la convirtió a los 10 años en la número uno de Venezuela, y allanó el camino para su despegue en Estados Unidos.
“Ser considerada para representar a Venezuela por primera vez en un Mundial, es un logro inolvidable”, aseguró la tenista.
Durante su etapa junior, acumuló triunfos a lo largo de Venezuela, destacando su participación en la Copa Gatorade organizada por ITF, y también fuera de las fronteras en la gira Cosat Sudamericana. Sus victorias le impulsaron hasta participar en el Orange Bowl (considerado el rito de iniciación de los futuros campeones del tenis a nivel mundial), y diversos torneos en suelo norteamericano.
En Estados Unidos, su talento le valió una beca colegial en Rochester – Minnesota, en el Lourdes High School. Donde conformó el equipo campeón estadal en 2011. Una vivencia que enfrentó con resiliencia y aplomo ante los obstáculos de enfrentarse a lo desconocido en un nuevo país.
“Fue mi mejor año en el tenis, quedamos campeonas estatales, un logro que hacía años que el colegio perseguía. Fue excelente el vivir esa experiencia en Estados Unidos, aprender una nueva cultura y vivir una experiencia escolar y deportiva con apoyo completo”, recordó Claudia.
De las pistas de cemento a la arena de la playa
A la par de su carrera en el tenis convencional, tras su regreso a Venezuela el acelerado crecimiento del beach tennis en Venezuela tocó a su puerta. La atmósfera señorial característica del tenis contrastaba al completo con el ambiente competitivo y a su vez relajado que ofrecía el beach tennis.
“El sistema de puntuación es el mismo, la técnica similar y también tienes una raqueta, cambia la superficie dura por arena y la altura de la red, que es alta. Me encantó el ambiente, el clima divertido despertó en mí una nueva pasión, podías divertirte, escuchar música, y al ver en mi un gran potencial, comencé a decantarme por el beach tennis”, destacó la joven deportista.
La duración de los torneos en comparación con el tenis convencional, más cortos; terminó por inclinar la balanza a favor de la arena, ya que le permitía abrirse paso hacia su otra pasión: la arquitectura.
Una decisión que Claudia vio respaldada de inmediato, al ser escogida para conformar la selección de Venezuela, en la primera participación del país en el Campeonato Mundial por equipos de la Federación Internacional de Tenis (ITF) 2012, en Rusia.
“Representar a mi país y jugar contra jugadores a nivel élite en un clima divertido y competitivo, fue inolvidable. A nivel personal y profesional, me demostró que cualquier meta es posible”.
El deporte le abrió las puertas
Durante su paso por el deporte colegial estadounidense recibió reconocimientos y ofertas de becas universitarias, pero no de arquitectura, la profesión de sus sueños. Por lo que regresó a Venezuela con la determinación firme: estudiar, y el deporte volvió a abrirle las puertas.
“Gracias al tenis, recibí una beca para estudiar arquitectura en la Universidad Central de Venezuela, una de las mejores universidades del país. Gracias al tenis estudié la carrera que quería. El deporte siempre me ha abierto las puertas en toda mi vida”.
Moreno compaginó seis años entre la exigente carrera de arquitectura junto a fines de semanas de viajes y torneos de beach tennis. Sin embargo, al graduarse su vida dio un giro.
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“Por cosas de Dios, la vida y el covid toda mi vida cambió 180 grados”, recordó Moreno.
Unas vacaciones al final de 2019 por la celebración de su graduación como arquitecta le hicieron replantear su vida de manera forzosa en Estados Unidos a causa de la pandemia.
“El camino ha sido muy fuerte, de muchos cambios, pero sigo haciendo lo que me gusta en mi campo y preparándome para ser una excelente profesional en el beach tennis”.
Con todo, agradece a día de hoy todo su esfuerzo y determinación ante los desafíos, mientras ejerce en Design Estudio 15, firma internacional especializada en diseño interior y detalles arquitectónicos con sede en Downtown Orlando, Florida, y compite a nivel profesional.
“Este es el momento en el que puedo explotar mejor mi potencial, tanto a nivel físico como mental, la preparación, confianza y nivel. Esta va a ser mi mejor época como deportista en el beach tennis”, dijo sobre su actualidad la nº368 del ranking mundial, en la que destacan recientes logros significativos en el ITF Beach Tennis World Tour como:
2023 – BT10 USA Beach Tennis Cup 1 (USA) 02 Sep – Campeona.
2023 – BT10 Ido Beach Tennis Tavares (USA) 1 Oct – Semifinales.
2023 – BT10 Ido Beach Tennis Zephyrhills (USA) 15 Oct – Campeona.
2023 – BT50 Kona House Orlando (USA) 28 Oct – Semifinales
2023 – BT10 USA Beach Tennis Cup (USA) 24 Nov – Campeona.
“A nivel deportivo y profesional siento que mis facetas están alineadas, y ahora sí tengo todo para explotar lo mejor de mí”, sentenció la venezolana que está lista para despuntar en el circuito profesional de beach tennis en Estados Unidos.
Con información Nota de Prensa
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