La búsqueda de Brenda del Castillo, Morena Verdi y Lara Gutiérrez, tres jóvenes vistas por última vez el viernes pasado, llegó a su más trágico final. Este miércoles, los cuerpos descuartizados de las tres mujeres fueron hallados en una casa de la localidad de Villa Vatteone, en Florencio Varela, a las afueras de Buenos Aires, Argentina.
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La pesadilla de las familias de las víctimas comenzó cuando las jóvenes desaparecieron tras subir a una camioneta blanca en la rotonda de La Tablada. La investigación, a cargo de la DDI de La Matanza, dio un giro crucial gracias al seguimiento de una de las antenas de celular. La señal de uno de los teléfonos de las víctimas permitió a los investigadores llegar a la vivienda, a más de 30 kilómetros de distancia del lugar donde se las vio por última vez.
Al momento del allanamiento, las autoridades encontraron a dos personas que limpiaban la casa, en un ambiente impregnado de un fuerte olor a lavandina, según fuentes policiales consultadas por Infobae. En el lugar, la policía halló rastros de sangre que confirmaron el peor de los escenarios.
El testimonio desgarrador del abuelo de las víctimas
La confirmación oficial de la identidad de los cuerpos fue dada por Antonio, abuelo de Morena y Brenda, quien compartió su dolor ante la prensa. «Son pocas palabras las que me salen en este momento. Pasó el desenlace que no queríamos», expresó visiblemente afectado.
Antonio relató el miedo de que sus nietas, al igual que el niño Loan Danilo Peña, no volvieran a aparecer. «Es lo que nos tocó vivir a nuestra familia. Los investigadores nos confirmaron que sí, son ellas», declaró. El abuelo también habló sobre el futuro inmediato de las familias y la necesidad de proteger a su esposa, quien se encuentra devastada. «Ella es una mujer que yo sé que, si la descuidamos, capaz hace cualquier cosa», manifestó.
Cuatro detenidos y una nueva hipótesis
Hasta el momento, hay cuatro personas arrestadas en conexión con este macabro crimen, incluyendo una pareja de nacionalidad peruana que fue detenida en un hotel alojamiento cercano. Se presume que esta pareja es la dueña de la casa donde se encontraron los cuerpos, mientras que las dos personas halladas durante el allanamiento se habrían encargado de la limpieza de la escena del crimen.
Según fuentes policiales, la nueva hipótesis del caso apunta a que las mujeres fueron asesinadas en el contexto de una fiesta organizada por una banda vinculada al narcotráfico, con posibles nexos en la Villa 1-11-14 del Bajo Flores, una zona a la que también se rastrearon los celulares de las víctimas. Brenda y Morena tenían 20 años, y Lara apenas 15.
El caso conmociona a la sociedad argentina, exigiendo justicia para estas tres jóvenes cuyas vidas fueron trágicamente arrebatadas.
Con información de Infobae
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