Juan Guaidó reconoció este viernes, en un acto de rendición de cuentas, que está en «deuda» con los venezolanos e, incluso, con la región latinoamericana, al no lograr, como prometió en enero de 2019, sacar a Nicolás Maduro del poder.
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«Lo primero que tengo que decir en este balance, y estoy consciente en este Venezuela, es que tenemos una deuda con los venezolanos, e incluso con la región. Nicolas Maduro, un bárbaro, acompañado de un pequeño grupo, sigue usurpando funciones, es un hecho», remarcó
No obstante, y pese al reconocimiento, afirmó que «la lucha sigue» hasta que se celebren unas «elecciones libres para recuperar la democracia«, pues la tarea de lograr el cese de la usurpación «sigue pendiente» .
«Y sigue pendiente porque no nos vamos a resignar, precisamente, por eso seguimos resistiendo, y por eso nuestro compromiso de vida y por el cual juramos por la Constitución se mantiene vigente. Nos corresponde asumir nuestros errores, entender por qué sigue eso como tarea pendiente. Pero, sobre todo corregirlos», recalcó.
Insistió en que es tiempo «trazar una ruta a puerto seguro en medio de una tormenta casi perfecta, dirían los economistas».
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Acto seguido, dijo que la elección libre que le deben a los venezolanos, y por la cual lo reconocen como presidente interino unos 50 países, se transformaría en ese cese de la usurpación.
Activos en el extranjero
Por otra parte, Guaidó dijo que lo más importante de su gestión fue la protección activos en el exterior, como Citgo, filial de la petrolera estatal Pdvsa.
En el mismo sentido, se refirió al caso del oro que el país tiene depositado en el Banco de Londres por valor de unos 1.772 millones de dólares, o el control de la petroquímica Monómeros en Colombia, que Guaidó ostentó desde 2019.
No obstante, con la salida de la Presidencia de Colombia de Iván Duque, fiel aliado del opositor, y la entrada de Gustavo Petro el pasado 7 de agosto, pasará a ser controlada por el Gobierno de Maduro.
Sin embargo, el antichavista insistió en que es responsabilidad del «gobierno encargado» mantenerla, aunque no explicó qué planes tiene para lograrlo.
Por otra parte, dijo que él y su equipo manejaron, durante estos tres años y medio, un promedio de 65 millones de dólares anuales, lo que asciende a 227,5 millones en total.
Detalló que, en 2020, el 70 % se ejecutó en programas sociales, alrededor del 14,17 % en el Parlamento, el 1,8 % en la «presidencia interina», el 7,51 % en el «trabajo diplomático y de relaciones exteriores» y el 5,92 % en el «consejo de administración de gasto».
En 2021, alrededor del 40 % -aseguró- fue destinado a la ayuda humanitaria, el 31 % en «defensa de la democracia», el 20 % entre el Parlamento, la «presidencia encargada» y la «diplomacia por la libertad»,
Mientras que el resto se encauzó en «el manejo de los gastos de los activos recuperados por la república».
Pero el opositor no brindó un desglose detallado por departamentos con cifras absolutas, ni detalló en qué consisten las gestiones de la «defensa de la democracia» o la «diplomacia por la libertad», entre otras cuestiones.
Con información de EFE
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