La basura propagandística de Rusia TV, Telesur y demás instrumentos de manipulación mediática, han tratado de imponer la matriz de opinión de que el gobierno de Ucrania, que combate una rebelión desde hace años en dos provincias orientales ante guerrillas financiadas por Rusia, son Nazis, porque están cometiendo genocidio contra los ruso-ucranianos de Donetsk y Luhansk.
Por Jorge Montenegro
Yo también le echaría plomo a un conjunto de colombo venezolanos (Auténticos venecos) financiados por Duque o Petro, que busquen la separación del Táchira de Venezuela, bajo la excusa que allí viven muchos colombianos. Pero lo más asqueroso de la tergiversación de Putin, ex KGB cuyo trabajo consistía en investigar a opositores, ver de qué pata cojeaban para luego denunciarlos ante la opinión pública (Ejemplo criollo, el movimiento “Me Too”), al llamar a los ucranianos de nazis.
Cabe destacar que Volodímir Zelenski, Presidente de Ucrania, es judío, y sus abuelos lucharon con el ejército rojo en contra de los Nazis. Pero sí es cierto que hoy algunos ucranianos -y muchos en el pasado- simpatizaban con los Nazis ¿Por qué?
Primero hay que entender qué fue el Holodomor y sus causas, explicadas genialmente por Neil deGrasse Tyson en la segunda temporada de la Serie Cosmos. Les recomiendo que lo vean, ya que Viggo Mortensen hace la voz del científico Nikolai Vavilov, el cual fue animado por plastilina.
Por decisiones burocráticas, Iósif Stalin obvió las investigaciones sobre las semillas de Vavilov, para seguir el plan de un asesor -lo que hoy conocemos en los ministerios como un chavista enchufado jalabolas-, quien lo convenció de que si pones una semilla en un congelador, la misma podría germinar en invierno.
La decisión estúpida de Stalin provocó hambruna en toda la Unión Soviética, y su solución fue la colectivización de las tierras ucranianas. Eso provocó la muerte de 4 millones de personas. Básicamente, los ucranianos apoyaron a Hitler, porque paradójicamente, querían que los salvara del mayor genocida de la historia: Stalin.
Nikolai Vavilov también murió de hambre en prisión, por órdenes del líder comunista.
Hoy Ucrania enfrenta de nuevo la brutalidad rusa. Sin embargo, Putin, el experto en chismes, comunicaciones o como le llama William Castillo “Guerra de cuarta generación”, ha perdido la guerra comunicacional con CNN, gracias a un pueblo valiente como el ucraniano, dirigido por un judío, que antes de ser Presidente, era un comediante. Y vaya que el género más difícil de la actuación, es el humor.
A Putin no le conviene una guerra larga ni una ocupación, Recuerden que fueron los soviéticos las primeras víctimas de los Talibanes. Y los ucranianos los odian más que nada en este mundo porque hace casi cien años, mataron a sus abuelos de hambre.
Biden pierde tanto como Putin
Pero Putin no es el único gran perdedor, repudiado incluso por su mismo pueblo. Biden se ha consolidado como un pusilánime. Abandonó a los ucranianos de la misma manera que abandonó al movimiento San Isidro (¿Recuerdan las protestas en Cuba?) y que fue incapaz de evacuar a sus propios compatriotas de Afganistán. Por eso, antes de su débil respuesta al conflicto en Ucrania, ya batía récords de rechazo en apenas un año de gobierno https://www.latimes.com/espanol/eeuu/articulo/2022-01-20/sondeo-la-popularidad-de-biden-toca-fondo-al-anio-de-mandato
De noche, duermo mientras veo History Channel (El 2, el 1 es en el que todos los programas son sobre los acuerdos tecnológicos entre los Nazis y los Extraterrestres), y en una oportunidad vi un documental sobre Calígula. “Que me odien, pero que me teman”, era su filosofía, (Bastante maquiavélica, como buen italiano). Biden no asusta a nadie.
Biden en la Casa Blanca no le sirve a la humanidad. Que tu odio a Trump no te cierre los ojos ante el mayor traidor que ha conocido el hemisferio occidental.
Por Jorge Montenegro
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