Carlos Casanova Leal
Los ciudadanos de un país tendrán más calidad de vida y prosperidad económica, dependiendo del modelo económico que esté vigente, si la extinta Unión Soviética, China, Vietnam y otros abandonaron el modelo comunista o sus variantes, y pendularon a economías abiertas de carácter capitalista, es lógico pensar que el modelo socialista del mal llamado siglo XXI se inspira en el pasado de estas prácticas económicas y de ahí su reiterado fracaso a donde le hace compañía a Cuba, si Colombia y Chile siguen el criterio del decrecimiento económico escoltarán a Venezuela y Cuba igualándoles en pobreza.
Por Carlos Casanova Leal
Los latinoamericanos se dejan cautivar por los planteamientos del Che, Fidel y hablan de Marx, no en vano en los procesos electorales recientes los chilenos acompañaron con su voto al PCCH y en Colombia al pacto histórico, un variado abanico de izquierdas radicales, el pronóstico desde ya se sabe que sucederá.
Para cuando llegó la revolución castrista, Cuba era un país más próspero que el que se presenta hoy como resultado de la experiencia socialista, la migración no se hizo esperar, y llegaron al pantano que era el estado de La Florida, ahí se desarrollaron, crecieron e hicieron del estado de La Florida bastión de la economía norteamericana, lo cual indica, que solo moviéndose de un país que les negó reglas claras en la economía lograron crecer y prosperar, no es que el cubano sea flojo, no es el modelo, el de su país los llevó a la pobreza y el de EEUU los condujo a la prosperidad.
Por análisis en contrario, si el modelo económico de Cuba fuera de libertad económica competiría con La Florida como puerto comercial constituyéndose en la atracción turística más visitada del Caribe, pero tiene una tiranía castrocomunista.
Es el Latinoamericano el que tiene que cambiar de mentalidad, y entender que podemos ser el sub continente más importante que Europa.
Se acaba de publicar un informe que así lo revela conforme en el cual los Latinos en Estados Unidos representan la quinta economía del mundo, Según “los investigadores, el PIB de esta comunidad en el país en 2020 fue de 2,8 billones de dólares y si esta fuera la población de un país independiente su aporte económico sería el quinto más grande después de Estados Unidos, China, Japón y Alemania, esto significa que la actividad económica de los latinos, que son casi el 19 % de la población de Estados Unidos, ha sido mayor que la del Reino Unido, India o Francia”.
Este estudio de la Universidad de California viene a ratificar varias cosas, en primer lugar que Latinoamérica puede ser en principio la quinta economía del mundo, pero puede ser la segunda también, revela el informe que no lo somos en razón de que acompañamos a los populistas que quieren hacer decrecer las economías mientras otras crecen, que las ideas comunistas que se han hecho legendarias con las guerrillas y sus movimientos políticos que quieren restaurar el pasado con pensamientos de control social por pobreza ahora remozados de ideas de alarmismo climático.
Lo que nos distancia de ser un subcontinente próspero es el hecho de que se debe cambiar de pensamiento, desde el ciudadano hasta el de los dirigentes, abandonando el populismo por la formación, información y educación a la altura de los cambios que se vendrán en el mundo.
Vivimos en la crisis en razón de que los dirigentes viven de pensamientos que perdieron vigencia, el cambio ya no es una voz que se alza en Venezuela debe ser para todos en Latinoamérica.
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