Gina Romero, relatora especial de las Naciones Unidas sobre la situación de los defensores de los derechos humanos, condenó enérgicamente los ataques perpetrados por grupos parapoliciales contra madres de presos políticos en Caracas. El incidente ocurrió durante una vigilia pacífica que las mujeres realizaban frente al Tribunal Supremo de Justicia (TSJ).
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A través de sus redes sociales, Romero expresó su repudio a la violencia. «Condeno la acción violenta contra las madres del Comité de Madres en Defensa de la Verdad, quienes realizaban un campamento y vigilia pacífica frente al TSJ para exigir la liberación de sus hijos», manifestó la relatora.
Romero calificó de «muy problemática» la agresión, en la que las madres fueron golpeadas por individuos encapuchados que también les confiscaron sus documentos de identidad y teléfonos. «No solo todos los presos políticos deben ser liberados, también la búsqueda de justicia y verdad debe ser protegida. La vigilancia ilegal contra las organizaciones debe parar de forma inmediata», sentenció.
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