La noche de este sábado, Haití registró un movimiento telúrico de magnitud 5,8, considerado la réplica más fuerte tras el sismo de magnitud 7,2 que azotó la península sur por la mañana, el cual dejó al menos 300 muertos.
De acuerdo a los reportes del Servicio Geológico de Estados Unidos, el hipocentro del temblor se originó a 12 kilómetros de profundidad en el departamento de Grand’Anse, en extremo sur de la isla. Hasta el momento, se desconoce el impacto y los daños que haya podido causar.
Del mismo modo, a pesar de que la réplica puede causar algunas víctimas y requerir «una respuesta a nivel local o regional».
Se espera que el impacto potencial sea «relativamente localizado», de acuerdo a la institución estadounidense.
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El segundo tremor se produjo mientras el pueblo haitiano continuaba recuperándose del terremoto de magnitud 7,2.
Este dejó un saldo de 304 muertos, más de 1.700 heridos y cuantiosos daños materiales que aún no han sido valuados por las autoridades.
Debido a la difícil situación por la que atraviesa Haití, el primer ministro, Ariel Henry, declaró el estado de emergencia por un mes.
Según Henry, algunas ciudades quedaron casi completamente destruidas, con edificios parcialmente derrumbados y calles llenas de escombros.
Con información de: RT
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