El vicepresidente del Consejo Nacional Electoral, Enrique Márquez, afirmó que a pesar de que el CNE no es perfecto, tiene la responsabilidad de trabajar para mejorar las cosas y significó que el reciente proceso electoral realizado el 21 de noviembre «fue un buen proceso con algunos problemas».
Así lo expresó en entrevista concedida al programa Kicosis transmitido por Globovisión. «Lo último de Barinas es un problema, pero 22 gobernaciones y 335 alcaldía hicieron trámites de poder sin problemas, es decir, sin problemas para el CNE, en el sentido que no se reconocieran los resultados».
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En el caso de Barinas reflexionó que la solución no es que los rectores renuncien a sus cargos y mencionó que los votos se estaban contando bien hasta que hubo una interrupción generada por la Sala Electoral del Tribunal Supremo de Justicia, pero argumentó que de esta situación también se aprende en aras de buscar un estado de bienestar. «Mi compromiso es estar en el CNE sin descanso, buscando que esa institución sea cada vez mejor, le de garantías a la gente y al pueblo».
El rector del ente comicial hizo hincapié al destacar que no hay soluciones mágicas, estas se construyen y ese es parte de su compromiso asumido en el CNE, por lo que lejos de desanimarse esto los compromete aún más en la construcción de nuevas alternativas.
Cambio político
Márquez reconoció que hiciste una crisis política en el país que afecta a la economía del país y en el caso particular de lo ocurrido en Barinas dijo que este tiene influencia en la credibilidad de los ciudadanos y que este puede llevar a hacer creer que no hay respeto por la Constitución.
«Debe haber un cambio y ese cambio debe empezar por la clase política, para generar confianza en todos los factores del país», puntualizó.
Con información de: Noticia al Dia
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