Al sacerdote de Cojedes lo asesinaron, durante la tarde este martes, al tratar de evitar que robaran a un feligrés al salir de misa en el Santuario Eucarístico San Juan Bautista de San Carlos.
El obispo de San Carlos, monseñor Polito Rodríguez, informó previamente, en un comunicado, que el asesinato ocurrió a las afueras de la residencia del sacerdote de 39 años, “después de oficiar la eucaristía en privado con unos fieles, por razones de la situación del covid-19”. También se informó que los feligreses fueron testigos del trágico suceso.
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“Cuando estas se estaban despidiendo, el asaltante sujetó a una de las personas, y el padre intervino para ayudarla, recibiendo un disparo en el pecho que perforó su corazón”, informó la Fundación Pontificia Ayuda a la Iglesia Necesitada (ACN) en otro comunicado este miércoles 21 octubre.
El sacerdote de Cojedes nació en Caracas. Sus padres son de Portugal.
ACN expresó “enorme tristeza y consternación” ante este crimen, especialmente porque el padre Ferreira era uno de sus socios de proyectos.
“Con ocasión de los últimos dos viajes a Venezuela, ACN visitó al presbítero, al que apoyaba en la reconstrucción del techo del santuario. Fereira dejó una huella imborrable como sacerdote entregado a su pueblo, profundamente misionero y de un gran amor a la eucaristía”, señaló.
La fundación resaltó que “hasta el final de su vida”, vieron “en él un ejemplo de amor a la eucaristía y entrega a los demás”. “Sin embargo, nos duele que en estos momentos en los que Venezuela necesita tanto a sus sacerdotes, este joven sacerdote de 39 años haya sido víctima de la violencia que afecta al país desde hace años”, agregó.
ACN señaló que se “une en oración por el eterno descanso del presbítero” y envió su más sentido pésame al obispo de San Carlos, los padres y hermanos del sacerdote, así como a todos los feligreses de la parroquia.
Con información Panorama
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