El Observatorio Venezolano de Finanzas (OVF) de la Asamblea Nacional (AN) electa en los comicios de 2015, señaló que la inflación en el país se ubicó en 55,2% en enero pasado. Mientras que la inflación interanual, es decir, de enero de 2020 a enero de 2021, fue del 3.478%.
El mayor aumento de los precios lo registró el OVF en el rubro de esparcimiento, en el que hubo un incremento de 312%, seguido del de salud (70,9%), restaurantes y hoteles (70,3%) y vestido y calzados (69,8%).
Por su parte, la inflación de los alimentos y bebidas no alcohólicas fue de 58,1%.
El fundador del observatorio, el diputado electo en los comicios de 2015, Ángel Alvarado, explicó en la misma red social que Venezuela ya acumula 38 meses en hiperinflación «y va rumbo a convertirse en la más larga de la historia, pasando a Nicaragua».
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Para el economista, «la devaluación del bolívar y el ajuste de los precios del rubro de esparcimiento explica en gran medida la variación de precios del 55% en enero, lo cual confirma que la hiperinflación se extenderá hasta el año 2022».
La OVF también calculó que el precio de la canasta alimentaria básica en enero se ubicó en 423 millones de bolívares, lo que, siempre según sus cálculos, equivale a 251,2 dólares.
El salario mínimo en Venezuela, el que percibe la mayoría de la población, es de 1,2 millones de bolívares, lo que ha empujado a muchos venezolanos a trabajos informales, pagados en dólares, para completar sus ingresos y poder comprar los alimentos de esa canasta básica.
EFE
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