EXCLUSIVA | CICPC detuvo al #MonstruoDeGuayana: Hernán Mendoza enfrenta la justicia +video

La tarde de este lunes 18 de mayo fue detenido el profesor de natación, Hernán Mendoza, conocido como el «Monstruo de Guayana».

Pasadas las 5 de la tarde, un carro rojo sin placa salió desde la sede del Cicpc en San Felix, hasta en su residencia ubicada en Los Olivos en la ciudad de Puerto Ordaz.

Funcionarios del Cuerpo de Investigaciones Científicas Penales y Criminalísticas de la región Guayana, a cargo del comisario general Mario Pacheco, jefe de la región escucharon las declaraciones de las víctimas.

Verificaron además que sobre Mendoza existían dos denuncias por actos lascivos, una en 2011 y otra en 2014, en ambas, niñas aseguraban que el profesor de natación les había tocado sus partes íntimas.

Mendoza fue señalado por decenas de mujeres en las redes sociales por presuntamente haber cometido actos lascivos, cuando tenían entre 5 y 15 años de edad.

Una mujer de nombre Melisa, recuerda que a los 20 años durante sus clases de natación con Hernán Mendoza, este la había «manoseado».

Según el relato de las víctimas, el entrenador se sumergía en las piscinas de diversos centros de natación de Puerto Ordaz, para así «tocar y manosear a las niñas».

En las redes sociales más de 20 mujeres lo señalaron de haber cometido actos lascivos en las piscinas de Club Italo Venezolano de Guayana, el Centro de Natación Esther Capriles, el colegio Gonzalo Méndez, así como el Club Portugués y el Iberoamericano, entre otros.

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Desde el mismo momento en que las víctimas empezaron a denunciar a Hernan Mendoza como su abusador, en las redes sociales, en Núcleo Noticias contactamos a las víctimas, quienes describieron en llamadas, audios y videos las aberrantes prácticas de este sujeto.

«Con la excusa de corregir posturas», fue la frase con la que estas mujeres reseñaron sus denuncias que se basaron en: tocar los senos mientras flotaban. Beatriz y a Melisa detallaron que les frotaba sus partes íntimas, tal como lo vivió Alexandra Díaz y Valen.

Fany Rojas,por su parte, en tercer año de bachillerato tuvo un desencuentro con su profesor de educación física, Hernán Mendoza, luego de que este la intentara besar. Los directivos del plantel desecharon la denuncia no solo de Fany, sino también de otra joven a quien el docente le «recostó» sus partes íntimas.

En los casos más osados, este profesor obligó a las niñas a tocarle sus genitales mientras contaban series en los ejercicios de respiración, como lo vivió Jhuanna Pino.

También las indujo a que le practicaran sexo oral, como fue la propuesta que le hizo a Karla, cuando solo tenía 5 años, o lo que tuvo que presenciar Carolina cuando tenía 12 años «obligó a una niña a hacerle sexo oral y a mí a ver». Con Nattasha Gómez llegó a introducir sus dedos en los genitales de la niña, cuando solo tenía 12 años.

Mendoza se ganó la confianza de los padres y cuando Beatriz le dijo a su madre Antonieta, que se quería de la clase de natación porque el profesor «me toco allá abajo», su madre reaccionó como una tigra y lo enfrentó. Hernán lo negó el resto de los padres presentes le creyeron al entrenador

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«A mí me intentó penetrar», dijo María, recordando el episodio en el Gonzalo Méndez cuando solo tenía 12 años, mientras que a Carolina la obligaba ver cuando otra niña, más grande, le practicaba sexo oral.

Estos son algunos de los testimonios que narran estas mujeres, sus edades hoy rondan entre los 25 y 35 años, pero el abuso sexual se cometió cuando solo eran unas niñas.

Muchas de estas víctimas callaron en silencio por miedo o vergüenza, ni sus padres supieron lo que pasó, pero varias niñas sí lo denunciaron no solo ante los directivos de los clubes de natación, como fue el caso de Jhuanna Pino y Yulimar Tagliaferro en 2005, sino que además, otras niñas afectadas acudieron al Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas, CICPC, subdelegación de Ciudad Guayana y formalizaron una denuncia por abuso sexual. Allí reposan dos expedientes uno en 2011 y otro en 2014.

Hoy, las chicas que guardaron silencio por tantos años, empezaron a ver justicia y aunque algunas están fuera del país, las que se encuentran en Venezuela llegarán hasta las ultimas consecuencias.

En diversas oportunidades nos han dicho que quieren «sacar a ese monstruo de las piscinas y que nunca más pueda hacerle daño a otra niña».

Hoy están demostrando valentía y exigen a las autoridades encarcelar a este profesor a quien acusan de pederasta.

Apoyo legal y psicológico

Richard Daal, abogado que representa a las víctimas aseguró que a pesar que el abuso se cometió hace varios años, «la acción penal sigue vigente».

Asegura además que buscará la encarcelación y judicialización de este profesor de natación.

Las víctimas cuentan además con la psicóloga, Saira Balza Velázquez, que desinteresadamente las atiende, tras conocer el caso en Núcleo Noticias.

Luego de haber acudido a la redes sociales a exigir justicia, ahora Hernán Mendoza está en manos de las autoridades. Evitar que otras niñas sean lastimadas por este entrenador será la responsabilidad del Ministerio Público.